Basílica de Notre-Dame

Basílica de Notre-DameLa basílica de Notre-Dame de Ginebra se construyó entre 1852 y 1857. La misma se debió, en gran parte, a los esfuerzos conjuntos de los círculos católicos de la ciudad.

Y es que hasta mediados del siglo XIX los fieles solo podían acudir a la iglesia de Saint-Germain para escuchar misa. De esa forma, ante la falta de lugares en los que practicar el culto, en 1850 se decidió otorgar un terreno a la comunidad católica para la construcción de la citada basílica. En el mismo se encontraban las antiguas fortificaciones.

Se construyó completamente de piedra arenisca y su arquitectura se inspira en el estilo gótico del siglo XII. En gran medida, se basa en el diseño de la catedral de Amiens, al norte de Francia. Finalmente, la última gran restauración tuvo lugar en 1981. La Basílica de Notre-Dame se encuentra situada cerca de la Estación de Cornavin. Así que resulta fácil llegar a la misma a pie desde este punto de la ciudad.

Interior de la Basílica de Notre-Dame de Ginebra

La estatua blanca de la Inmaculada, ofrecida a los católicos de Ginebra por el Papa Pío IX, recibió los honores de la «coronación» en 1937. Está en la capilla central del deambulatorio. Los objetos de arte más antiguos de la basílica datan del período inmediatamente anterior a la Reforma protestante:

  • Una antorcha, adornada con pintura, perteneciente a un convento suprimido durante la Reforma protestante.
  • Un panel de madera tallada que lleva en bajorrelieve una imagen de la Virgen mutilada a hachazos por los partidarios de la reforma.

Otras obras u objetos de arte son los medios de culto: la estatua de Notre-Dame de Genève, el tabernáculo y el mobiliario litúrgico esculpido. Destacan especialmente las vidrieras de la basílica. Algunas son de producción neogótica semi-industrial, pero la mayoría dan testimonio de la evolución del arte de las vidrieras durante el siglo XX.

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